Hablamos de Triticale – parte II

El azar contribuyó de forma decisiva a la mejora de la fertilidad de la espiga del triticale ya que en 1967 se produjo en los campos de ensayos del CIMMYT (Sonora) el cruzamiento espontáneo entre una línea experimental y un trigo vecino de origen desconocido que le aportó además de enanismo y ciclo corto una buena fertilidad en la espiga. En la descendencia de ese cruzamiento se seleccionó la nueva variedad “Armadillo” que desde 1970 ha formado parte de todos los pedigrís utilizados por el CIMMYT.
El consumo de semillas certificadas de triticale en España ha pasado en dos décadas de poco más de 4.000 toneladas en 2003 a las más de 30.000 toneladas en 2022 que fue el año en el que se consiguió el récord de certificación en esta especie.
Las nuevas variedades de ciclo corto como BONDADOSO, RGT COPLAC, VALEROSO o LG RELÁMPAGO han sido las más sembradas en los últimos años demostrando su buena aptitud para producir granos y ensilados para alimentación animal superando a los testigos de los ensayos oficiales de registro de la Oficina Española de Variedades Vegetales (OEVV) con una productividad claramente superior.
El alto vigor de partida y la resistencia a enfermedades han hecho que el triticale sea el cereal preferido por agricultores que practican la agricultura de conservación y la agricultura ecológica, así como por aquellos que desean abaratar la factura de sus insumos (fertilizantes, herbicidas, fungicidas, etc.). Además, los ensayos de valor agronómico realizados en localidades representativas del cultivo en el sur de España confirman que las nuevas variedades de esta especie son al menos tan productivas como las variedades más sembradas de cebada, trigo harinero y trigo duro.
Al ensayar las nuevas variedades de esta especie para medir su valor agronómico se debe de tener en cuenta tanto su productividad en grano, como su aptitud para la producción de forrajes y ensilados.
En contra de lo que muchos pensaban, las nuevas variedades de menor altura y ciclo más corto producen más y mejor ensilado debido al mayor número de hojas y biomasa, así como a una mayor palatabilidad debido a la mejor resistencia a las enfermedades fúngicas foliares.
La producción de ensilados a partir de triticale está desplazando a los producidos con avenas, cebadas y trigos forrajeros en numerosas comarcas españolas.
Bibliografía.
https://www.mapa.gob.es/es/estadistica/temas/estadisticas-agrarias/ (2022).
https://www.fao.org/faostat/es/#home (2021)
Las semillas certificadas de nuevas variedades acompañarán la recuperación del triticale en los próximos años. Revista Cooperación Agraria (Solís, 2009)
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